En Europa se encuentran las mayores colecciones de arte del mundo entero. Las opciones para conocer museos importantes son tan amplias que es demasiado complicado elegir cuales visitar, es por ello que diseñamos un listado de los museos más importantes para visitar durante tu estadía por europa.
1) Museo del Louvre (París)
Es el museo más importante de Francia y el más visitado del mundo. La colección del Louvre comprende alrededor de 300.000 obras anteriores a 1948, de las que se exponen cerca de 35.000. La inmensa colección está organizada de forma temática: antigüedades orientales, antigüedades egipcias, antigüedades griegas, romanas y etruscas, historia del Louvre y el Louvre medieval, pintura, escultura, objetos de arte, artes gráficas y arte del Islam.
Entre las pinturas más importantes del museo podras conocer La Gioconda de Leonardo da Vinci.
2) The British Museum (Londres)
Es uno de los museos más antiguos del mundo, y posee una de las colecciones de antigüedades más grandes y famosas que existen. Posee más de siete millones de objetos, los cuales se encuentran ordenados según su lugar de procedencia. A lo largo de todo el museo es posible encontrar cualquier tipo de objeto, desde porcelana china, hasta antigüedades prehistóricas y medievales, o medallas y monedas y de diferentes épocas. Las partes más llamativas del museo son la sección del Antiguo Egipto y la de la Antigua Grecia.
3) Museo del Prado en Madrid
Es el museo más importante de Madrid y uno de los museos de arte más importantes y visitados del planeta. Su colección se basa principalmente en pinturas de los siglos XVI al XIX. Entre sus cuadros cuenta con obras maestras de pintores de la talla de Velázquez, Rubens, El Greco, Goya o Rafael entre otros.
Entre los cuadros más famosos se encuentran Las Meninas de Velázquez, El 3 de Mayo de 1808 en Madrid y La Maja Desnuda de Goya y El Pasmo de Sicilia de Rafael.
4) Museos Vaticano (Roma)
Comprenden una serie de colecciones arqueológicas, una pinacoteca, colecciones de arte moderno y arte antiguo, objetos históricos y frescos de diversos pintores de gran renombre como Miguel Ángel y Rafael. Con centro en el Torso de Belvedere, los Museos Vaticanos son una muestra expuesta entre los espacios que se formaron al unir los dos Palacios: el Vaticano y el Belvedere.
5) Galería Ufizzi (Florencia)
Construído por encargo de los Medici, la galería contiene una de las más antiguas y famosas colecciones de arte del mundo. Se ven representados desde Giotto, Botticelli, Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Rafael, Caravaggio, Rembrandt, Rubens hasta maestros holandeses y alemanes. La Galería Uffizi es apasionante en cada rincón y promete al turista un paseo imponente y fantástico. Entre la pinturas más famosos se encuentran La sagrada familia, de Miguel Ángel, El nacimiento de Venus, de Botticelli y La Anunciación, de Leonardo da Vinci.
6) Galería de la Academia (Florencia)
Italia aloja en el seno de Florencia una de las esculturas más reconocidas a nivel mundial. Es la Galería de la Academia la elegida para dar la bienvenida a los turistas que buscan conocer el David, de Miguel Ángel. La Galería propone un paseo entre pinturas, esculturas y música más que enriquecedor y cálido. Es un paseo obligado, pero sobre todo elegido por miles de turistas año a año.
7) Galería Nacional (National Gallery of London)
Es el museo de arte más importante de Londres y uno de los más reconocidos del mundo. La Galería Nacional de Londres expone obras pictóricas de procedencia europea, desde 1250 hasta 1900. La colección permanente está compuesta por más de 2.300 pinturas, entre las que destacan algunas obras de Rembrandt, Velázquez, Van Gogh, Tiziano, y Miguel Angel entre otros. Siendo posible observar la evolución de los estilos pictóricos desde el Renacimiento hasta el Postimpresionismo.
Si desea ver el listado completo haga clic en el siguiente enlace www.museoseuropa.com.
(Fotos obtenidas desde Wikipedia Commons).
Blog sobre Historia, Arquitectura, Arte, Cultura y Museos en las principales ciudades de Europa. Grecia Clásica, Renacimiento, Mainerismo, Barroco, Edad de Oro de los Países Bajos, Rococó, Romanticismo, Arte Académico, Realismo, Impresionismo, Post-Impresionismo, Fovismo, Cubismo, Dadaísmo, Surrealismo y mucho más.
jueves, 11 de junio de 2015
viernes, 15 de mayo de 2015
Coliseo, Foro Romano y Monte Palatino en Roma, Italia
Un ícono, un cerro y el progreso definen Coliseo, Palatino y Foros Romanos.
El Coliseo es un antiguo anfiteatro, construido en el valle del cerro Palatino, que con su magnitud deja entender la importancia del Imperio Romano. Los Foros Romanos aportan al escenario para construir un mundo de batallas y de una gran estrategia de dominio.
El Coliseo
Con capacidad para más de 50000 personas, con actividad por más de 500 años, este gigante de la construcción se mantiene vigente en la actualidad como ícono de Roma y como escenario del Vía Crucis, dirigido por el Papa. Centro de batalla de gladiadores, el Coliseo fue construido desde el año 72 hasta el 80 y demuestra en la actualidad el secreto de la sociedad romana de progreso y estabilidad.
El Coliseo Romano es un auténtico Patrimonio de la Humanidad (Unesco, 1980) que fue declarado como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo en 2007. Se conserva gracias al cristianismo que lo convirtió en un santuario, tras el reconocimiento a los mártires que allí estuvieron cautivos. A pesar de estar deteriorado por las inclemencias propias del tiempo, el visitante podrá reconocer la imperiosa arquitectura romana en cada una de sus gradas.
Al ser el centro de atención de todos los turistas, se sugiere visitarlo muy temprano a la mañana. La visita puede realizarse todos los días de 8.30 hasta una hora antes del atardecer (excepto año nuevo y navidad, que el sitio permanece cerrado).
Monte Palatino
Habitado desde hace más de 3000 años, este cerro es el más destacado de las colinas romanas por los restos de las construcciones que allí permanecen como testigos de una larga historia del imperio. Se recomienda no dejar de visitar el palacio Domus Flavia, la Casa de Augusto y los Jardines Farnesianos, entre otros.
Este majestuoso Monte Palatino esconde en sus laderas la antigua leyenda de Rómulo y Remo y esa bella loba que los amamantó. Además, fue el centro para varias familias de clase alta que allí construyeron palacios ostentosos, que todavía hoy pueden observarse en vestigios de las construcciones.
A la hora de acceder al lugar es importante contar con tiempo suficiente para pasear. El cerro Palatino tiene mucho para mostrar y numerosos caminos para recorrer. Al menos una mañana o una tarde entera deben ser designados para esta salida.
Además, se sugiere en este lugar comprar las entradas para el Coliseo. De este modo, se evitan largas filas en el histórico anfiteatro.
Foros Romanos
Esta zona se caracteriza por haber sido el centro comercial y público del Imperio. Olvidado durante mucho tiempo, se recuperó en el siglo pasado. Lo más importante es poder recorrer la Vía Sacra y el Arco de Tito (arco del triunfo), para comprender la magnitud de los romanos y de sus batallas.
Este paseo por los Foros Romanos le dejará al turista imágenes únicas en las ruinas de diversos templos, como el de Rómulo, el de Vesta y el de Venus y Roma, o en las ruinas de la Basílica Emilia o de la Basílica Julia. Sucede que con el papa Urbano V, en el siglo XIV, renovó el interés por estas construcciones que habían sido abandonadas. En ese entonces fueron utilizadas como canteras para la edificación de nuevos sitios, sobre todo en el Vaticano.
También, en este paseo en los Foros Romanos se sugiere liberar bastantes horas del día para aprovecharlo al máximo.
Importante: existe una entrada combinada para los tres lugares. De esta forma se puede visitar Coliseo, Palatino y Foros Romanos en un día, que será agotador por tanta caminata, pero inolvidable por tanta maravilla y tanta historia reunida en un solo lugar.
El Coliseo es un antiguo anfiteatro, construido en el valle del cerro Palatino, que con su magnitud deja entender la importancia del Imperio Romano. Los Foros Romanos aportan al escenario para construir un mundo de batallas y de una gran estrategia de dominio.
El Coliseo
Con capacidad para más de 50000 personas, con actividad por más de 500 años, este gigante de la construcción se mantiene vigente en la actualidad como ícono de Roma y como escenario del Vía Crucis, dirigido por el Papa. Centro de batalla de gladiadores, el Coliseo fue construido desde el año 72 hasta el 80 y demuestra en la actualidad el secreto de la sociedad romana de progreso y estabilidad.
Vista exterior del Coliseo Romano
El Coliseo Romano es un auténtico Patrimonio de la Humanidad (Unesco, 1980) que fue declarado como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo en 2007. Se conserva gracias al cristianismo que lo convirtió en un santuario, tras el reconocimiento a los mártires que allí estuvieron cautivos. A pesar de estar deteriorado por las inclemencias propias del tiempo, el visitante podrá reconocer la imperiosa arquitectura romana en cada una de sus gradas.
Vista interior del Coliseo Romano
Al ser el centro de atención de todos los turistas, se sugiere visitarlo muy temprano a la mañana. La visita puede realizarse todos los días de 8.30 hasta una hora antes del atardecer (excepto año nuevo y navidad, que el sitio permanece cerrado).
Monte Palatino
Habitado desde hace más de 3000 años, este cerro es el más destacado de las colinas romanas por los restos de las construcciones que allí permanecen como testigos de una larga historia del imperio. Se recomienda no dejar de visitar el palacio Domus Flavia, la Casa de Augusto y los Jardines Farnesianos, entre otros.
Este majestuoso Monte Palatino esconde en sus laderas la antigua leyenda de Rómulo y Remo y esa bella loba que los amamantó. Además, fue el centro para varias familias de clase alta que allí construyeron palacios ostentosos, que todavía hoy pueden observarse en vestigios de las construcciones.
A la hora de acceder al lugar es importante contar con tiempo suficiente para pasear. El cerro Palatino tiene mucho para mostrar y numerosos caminos para recorrer. Al menos una mañana o una tarde entera deben ser designados para esta salida.
Además, se sugiere en este lugar comprar las entradas para el Coliseo. De este modo, se evitan largas filas en el histórico anfiteatro.
Foros Romanos
Esta zona se caracteriza por haber sido el centro comercial y público del Imperio. Olvidado durante mucho tiempo, se recuperó en el siglo pasado. Lo más importante es poder recorrer la Vía Sacra y el Arco de Tito (arco del triunfo), para comprender la magnitud de los romanos y de sus batallas.
Arco de Tito (data del año 81 a.C)
Este paseo por los Foros Romanos le dejará al turista imágenes únicas en las ruinas de diversos templos, como el de Rómulo, el de Vesta y el de Venus y Roma, o en las ruinas de la Basílica Emilia o de la Basílica Julia. Sucede que con el papa Urbano V, en el siglo XIV, renovó el interés por estas construcciones que habían sido abandonadas. En ese entonces fueron utilizadas como canteras para la edificación de nuevos sitios, sobre todo en el Vaticano.
Vista panorámica de los Foros Romanos
También, en este paseo en los Foros Romanos se sugiere liberar bastantes horas del día para aprovecharlo al máximo.
Importante: existe una entrada combinada para los tres lugares. De esta forma se puede visitar Coliseo, Palatino y Foros Romanos en un día, que será agotador por tanta caminata, pero inolvidable por tanta maravilla y tanta historia reunida en un solo lugar.
lunes, 27 de abril de 2015
Galería de la Academia de Florencia
Italia aloja en el seno de Florencia una de las esculturas más reconocidas a nivel mundial. Es la Galería de la Academia la elegida para dar la bienvenida a los turistas que buscan conocer el David, de Miguel Ángel. Esta escultura, de más de 5 metros de alto, sorprende por sus proporciones tan bien definidas, por la fluidez de los movimientos, por los detalles de cada gesto. Representa a David, luego de ganar la batalla a Goliat, pero una pose meditativa. Fue construida en el siglo XVI, expuesta frente al Palacio Viejo (Palazzo Vecchio) y llevada a la Galería de la Academia en 1873. Desde entonces, esta maravillosa obra de mármol es la razón directa de muchos turistas para conocer Florencia.
El arte de Miguel Ángel
Además, la galería tiene en su haber otras esculturas de Miguel Ángel, como Los prisioneros, cuatro obras que comenzó a construir para la tumba del Papa Julio II, pero que no llegaron a terminarse. Este detalle de la obra no concluida es lo que permitió a los especialistas observar el esfuerzo que hace el artista por trabajar la materia.
Asimismo, se halla en la misma sala, la estatua de San Mateo, encargada para la Catedral de Florencia.
Frescos y pinturas de artistas Florentinos
Otra de las salas de la planta baja reúne un fresco del siglo XV de Pontormo con los moldes de yeso utilizados por Lorenzo Bartolini y por Luigi Pampaloni, lo que demuestra la actividad intensa de los dos artistas. La intención de esta sala es mostrar la conexión de la Galería de la Academia con la Academia de Bellas Artes (ubicada al lado).
La muestra continúa con pinturas de artistas florentinos desde el siglo XIII al siglo XVI. La mayoría con tintes religiosos, importantes por ser pinturas de oro y tierra.
Desde hace unos años, la Galería de la Academia conserva una importante colección de antiguos instrumentos del Conservatorio Cherubini, que pertenecieron a la familia Medici y a la familia Lorena.
Un recorrido encantador para los turistas en Florencia
La Galería propone un paseo entre pinturas, esculturas y música más que enriquecedor y cálido. Es un paseo obligado, pero sobre todo elegido por miles de turistas año a año. Se recomienda visitarlo a primera hora y reservar los tickets o comprarlos online, para no perder tiempo valioso haciendo fila al ingreso.
El arte de Miguel Ángel
Además, la galería tiene en su haber otras esculturas de Miguel Ángel, como Los prisioneros, cuatro obras que comenzó a construir para la tumba del Papa Julio II, pero que no llegaron a terminarse. Este detalle de la obra no concluida es lo que permitió a los especialistas observar el esfuerzo que hace el artista por trabajar la materia.
Asimismo, se halla en la misma sala, la estatua de San Mateo, encargada para la Catedral de Florencia.
Frescos y pinturas de artistas Florentinos
Otra de las salas de la planta baja reúne un fresco del siglo XV de Pontormo con los moldes de yeso utilizados por Lorenzo Bartolini y por Luigi Pampaloni, lo que demuestra la actividad intensa de los dos artistas. La intención de esta sala es mostrar la conexión de la Galería de la Academia con la Academia de Bellas Artes (ubicada al lado).
La muestra continúa con pinturas de artistas florentinos desde el siglo XIII al siglo XVI. La mayoría con tintes religiosos, importantes por ser pinturas de oro y tierra.
Desde hace unos años, la Galería de la Academia conserva una importante colección de antiguos instrumentos del Conservatorio Cherubini, que pertenecieron a la familia Medici y a la familia Lorena.
Un recorrido encantador para los turistas en Florencia
La Galería propone un paseo entre pinturas, esculturas y música más que enriquecedor y cálido. Es un paseo obligado, pero sobre todo elegido por miles de turistas año a año. Se recomienda visitarlo a primera hora y reservar los tickets o comprarlos online, para no perder tiempo valioso haciendo fila al ingreso.
domingo, 26 de abril de 2015
Ponte Vecchio, Florencia
El Ponte Vecchio o Puente Viejo es sin vacilar la postal típica de Florencia. Inserto en la ciudad, permite a los pobladores atravesar el río Arno, sobre su punto más estrecho, y continuar por la vía De Giucciardini para el lado del Palacio Pitti y por la vía Por Santa María para el lado del Palacio Viejo. Estos dos palacios se unen por un corredor (Corredor de Vassari) que recorre la parte este del Ponte Vecchio. Este detalle convierte la postal en una foto mucho más significativa y romántica.
Sobre el oeste se abre una terraza que tiene un busto de Benvenuto Cellini, el orfebre más famoso del lugar. Esto tiene sentido porque sobre el puente están construidas una gran cantidad de casas colgantes que funcionan como locales, la mayoría son joyerías.
Una tradición para los amantes
La entrada al monumento se convirtió en el centro de la tradición de los amantes, que llegan hasta allí para colgar un candado con sus nombres y arrojar la llave al río, lo cual supone una unión eterna e imposible de ser separada. Sin el tinte romántico, desde hace unos años el gobierno estableció una multa para aquellos que sean vistos arrojando las llaves al agua, un modo de preservar la naturaleza.
Un puente con historia
El Ponte Vecchio se construyó en el siglo XIV, es el puente de piedra más antiguo de Europa. Gracias a su construcción ha resistido a una gran cantidad de inundaciones del río, incluso la famosa de 1966. Asimismo, es el único puente de Florencia que no fue destruido por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
La postal romántica se completa sobre las noches cuando las tiendas colgantes cierran sus persianas de madera, creando un ambiente que invita al paseo nocturno por el Ponte Vecchio. Los atardeceres, las parejas, los candados, las joyerías y el corredor se unen en una foto conmovedora y mágica que todo turista en Florencia debe visitar.
Sobre el oeste se abre una terraza que tiene un busto de Benvenuto Cellini, el orfebre más famoso del lugar. Esto tiene sentido porque sobre el puente están construidas una gran cantidad de casas colgantes que funcionan como locales, la mayoría son joyerías.
Una tradición para los amantes
La entrada al monumento se convirtió en el centro de la tradición de los amantes, que llegan hasta allí para colgar un candado con sus nombres y arrojar la llave al río, lo cual supone una unión eterna e imposible de ser separada. Sin el tinte romántico, desde hace unos años el gobierno estableció una multa para aquellos que sean vistos arrojando las llaves al agua, un modo de preservar la naturaleza.
Un puente con historia
El Ponte Vecchio se construyó en el siglo XIV, es el puente de piedra más antiguo de Europa. Gracias a su construcción ha resistido a una gran cantidad de inundaciones del río, incluso la famosa de 1966. Asimismo, es el único puente de Florencia que no fue destruido por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
La postal romántica se completa sobre las noches cuando las tiendas colgantes cierran sus persianas de madera, creando un ambiente que invita al paseo nocturno por el Ponte Vecchio. Los atardeceres, las parejas, los candados, las joyerías y el corredor se unen en una foto conmovedora y mágica que todo turista en Florencia debe visitar.
domingo, 19 de abril de 2015
Piazza del Duomo, Florencia
La Piazza del Duomo es el centro religioso de Florencia y un paso obligado para todos los que por esta ciudad transitan. Convergen en la Piazza del Duomo la Catedral de Florencia, el Campanario de Giotto, el Bautisterio de San Giovanni y el Museo de la Ópera, en el que se encuentran todas las esculturas originales de la Piazza.
La Catedral de Florencia Santa María del Fiore se construyó sobre la antigua catedral de Santa Reparata. Como esta había quedado pequeña para acoger a los florentinos, se decidió la construcción de lo que es la actual iglesia. Para hacer esa obra debieron destruir casas vecinas. Una historia cuenta que algunas de estas casas pertenecían a la familia Bischeri, quienes se opusieron a vender sus propiedades. Un incendio casual destruyó esas casas y la obra pudo llevarse adelante. Desde entonces los florentinos utilizan la expresión bischero como ofensa, para referirse a personas poco inteligentes o necias.
La esquina de la Piazza del Duomo, sobre la Via del Calzaioli, resguarda una de las más famosas curiosidades: aquí se halla la Loggia del Bigallo, una estructura gótica con varias galerías, que se utilizaban para exhibir a los niños desamparados o huérfanos.
Otro detalle interesante fue revelado hace unos años luego de las últimas excavaciones en el lugar: se ubicaban allí antiguas termas romanas.
Para aquellos turistas que gustan de las tradiciones se suele aconsejar visitar Florencia y, en especial, la Piazza del Duomo el sábado de Pascua, en el que tiene lugar la conocida Scoppio del Carro, una famosa ceremonia que se remonta a los tiempos de la Primera Cruzada.
Todas las construcciones sobre la Piazza del Duomo pueden visitarse con único ticket. Es uno de los centros más visitados de la ciudad, por lo que se recomienda reservar los billetes de acceso y realizar los paseos en horas de la mañana.
La Plaza del Duomo (wikepedia.org)
La Catedral de Florencia
Fachada de la Catedral (wikipedia.org)
Curiosidades de la Plaza del Duomo
La esquina de la Piazza del Duomo, sobre la Via del Calzaioli, resguarda una de las más famosas curiosidades: aquí se halla la Loggia del Bigallo, una estructura gótica con varias galerías, que se utilizaban para exhibir a los niños desamparados o huérfanos.
Otro detalle interesante fue revelado hace unos años luego de las últimas excavaciones en el lugar: se ubicaban allí antiguas termas romanas.
Celebración del Scoppio del Carro en Semana Santa
Para aquellos turistas que gustan de las tradiciones se suele aconsejar visitar Florencia y, en especial, la Piazza del Duomo el sábado de Pascua, en el que tiene lugar la conocida Scoppio del Carro, una famosa ceremonia que se remonta a los tiempos de la Primera Cruzada.
Un ticket para acceder a todo
Todas las construcciones sobre la Piazza del Duomo pueden visitarse con único ticket. Es uno de los centros más visitados de la ciudad, por lo que se recomienda reservar los billetes de acceso y realizar los paseos en horas de la mañana.
Campanario de Giotto (wikipedia.org)
miércoles, 15 de abril de 2015
Catedral de Florencia Santa María del Fiore
La catedral de Florencia Santa María del Fiore fue construida en el siglo XIII, sobre la Catedral de Santa Reparata. En el siglo XVI se demolió la fachada y recién a fines del XIX se concluyó la obra.
Esta catedral, resultó ser la más grande de Europa, con una capacidad para 30.000 personas. En la actualidad sólo es superada, en tamaño, por la Basílica de San Pedro en el Vaticano, la Catedral de San Pablo en Londres, la Catedral de Sevilla y la Catedral de Milán.
En su interior se destacan la cúpula realizada por Filippo Brunelleschi, las obras de Uccello y Andrea del Castagno y las más de cuarenta ventanas diseñadas por maestros de la talla de Donatello.
El paseo por el interior de la Catedral de Florencia muestra una elegante sencillez que se corresponde al ideal espiritual austero de Florencia en la Edad Media y principios del Renacimiento.
Este gran edificio fue financiado con fondos públicos como una iglesia estatal, por lo que las obras de arte fueron pensadas para honrar a los hombres ilustres de la época. Por supuesto, coexisten con otras religiosas, como el mosaico de Gaddo Gaddi y la ventana sobre el altar mayor diseñado por Donatello. Ambas representan la coronación de la Virgen María. Todas las obras coinciden en ilustrar la dignidad humana y su uso correcto en función de la comunidad.
Las cuarenta y cuatro ventanas de la Catedral de Florencia Santa María del Fiore representan el Antiguo y Nuevo Testamento y escenas de la vida de Cristo y de María. Es uno de los programas más importantes e imponentes del siglo XIV y XV en Italia por la convergencia de maestros florentinos que trabajaron para dar forma a este lugar.
La cúpula desarrolla en más de 3500 metros de superficie la tradicional creencia cristiana del cielo y el infierno. Sobre el altar mayor resalta la imagen de un Cristo resucitado, rodeado de ángeles.
Detrás del altar se halla la silla del obispo con una figura monumental de Cristo, realizada entre 1485 y 1497 por Benedetto da Majano.
Un trabajo de más de 170 años permite que los turistas se encuentren hoy con un espacio sagrado desde la religión para los creyentes, pero desde lo artístico y lo arquitectónico para todo aquel que sepa apreciar la importancia de las obras que allí se conservan. Un paseo por la Catedral de Florencia es más que recomendado, por la magnitud de su espacio y lo conmovedor de sus obras.
Esta catedral, resultó ser la más grande de Europa, con una capacidad para 30.000 personas. En la actualidad sólo es superada, en tamaño, por la Basílica de San Pedro en el Vaticano, la Catedral de San Pablo en Londres, la Catedral de Sevilla y la Catedral de Milán.
Vista aérea de la Catedral de Florencia y sus alrededores
En su interior se destacan la cúpula realizada por Filippo Brunelleschi, las obras de Uccello y Andrea del Castagno y las más de cuarenta ventanas diseñadas por maestros de la talla de Donatello.
El paseo por el interior de la Catedral de Florencia muestra una elegante sencillez que se corresponde al ideal espiritual austero de Florencia en la Edad Media y principios del Renacimiento.
La cúpula vista desde el interior, con los frescos de Giorgio Vasari (wikipedia.org)
Este gran edificio fue financiado con fondos públicos como una iglesia estatal, por lo que las obras de arte fueron pensadas para honrar a los hombres ilustres de la época. Por supuesto, coexisten con otras religiosas, como el mosaico de Gaddo Gaddi y la ventana sobre el altar mayor diseñado por Donatello. Ambas representan la coronación de la Virgen María. Todas las obras coinciden en ilustrar la dignidad humana y su uso correcto en función de la comunidad.
Las cuarenta y cuatro ventanas de la Catedral de Florencia Santa María del Fiore representan el Antiguo y Nuevo Testamento y escenas de la vida de Cristo y de María. Es uno de los programas más importantes e imponentes del siglo XIV y XV en Italia por la convergencia de maestros florentinos que trabajaron para dar forma a este lugar.
La cúpula desarrolla en más de 3500 metros de superficie la tradicional creencia cristiana del cielo y el infierno. Sobre el altar mayor resalta la imagen de un Cristo resucitado, rodeado de ángeles.
Vista de la cúpula (wikipedia.org)
Detrás del altar se halla la silla del obispo con una figura monumental de Cristo, realizada entre 1485 y 1497 por Benedetto da Majano.
Un trabajo de más de 170 años permite que los turistas se encuentren hoy con un espacio sagrado desde la religión para los creyentes, pero desde lo artístico y lo arquitectónico para todo aquel que sepa apreciar la importancia de las obras que allí se conservan. Un paseo por la Catedral de Florencia es más que recomendado, por la magnitud de su espacio y lo conmovedor de sus obras.
jueves, 19 de marzo de 2015
Galería Uffizi, Museo en Florencia, Italia
Los Medici, ordenaron construir un edificio para trasladar algunas de las oficinas de la Magistratura de Florencia, ya que no cabían en el Palacio Viejo. La construcción comenzó en el año 1560 bajo la dirección de Giorgio Vasari. La obras terminaron en 1581.
Algunas salas de este nuevo edificio sirvieron para conservar obras de arte de la familia. Desde entonces, se fueron sumando nuevas y más obras que conforman hoy la colección de obras universalmente reconocidas de todos los tiempos. La Galería Uffizi (galería de los oficios) se aloja en el último piso de este edificio.
Se ven representados desde Giotto, Botticelli, Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Rafael, Caravaggio, Rembrandt, Rubens hasta maestros holandeses y alemanes.
El vestíbulo de ingreso de la Galería Uffizi exhibe sarcófagos, relieves, estatuas y bustos de la familia Medici.
Las salas 10 a 14 (convertidas en un único espacio grande) son unas de las más famosas por dos razones: porque era el antiguo teatro del edificio y conserva parte del techo original y por alojar obras maestras renacentistas, producidas en la última década del Siglo XV. Entre estas, se hallan La primavera y El nacimiento de Venus, de Botticelli, sobre temas profanos del Renacimiento italiano, que ilustran la cultura en Florencia de fines del siglo XV.
La sala 35 custodia La sagrada familia, de Miguel Ángel, en el que se ve a la virgen María sentada en primer plano, tomando a Jesús desde los brazos de José.
Imperdibles obras del maestro Leonardo da Vinci
La sala 15 de la Galería Uffizi se ocupa de Leonardo da Vinci y muestra tres obras que desarrollan su camino artístico: la primera (El bautismo de Cristo) da cuenta de Leonardo como alumno de Verrocchio, la segunda (La Anunciación) es reconocida como la obra de su juventud y la tercera (La adoración de los magos) quedó inconclusa y testimonia la complejidad conceptual con la que trabajaba Leonardo.
Un recorrido por el arte europeo
Las demás salas del museo permitirán conocer una gran cantidad de pinturas y esculturas que enseñan el recorrido artístico europeo que refiere a un sinfín de hechos históricos de relevancia mundial. La Galería Uffizi es apasionante en cada rincón y promete al turista un paseo imponente y fantástico.
El museo tiene reglas de conducta que sugieren leer con antelación. Además, el edificio se conecta con el Palacio Pitti a través de un corredor elevado. Para poder visitarlo es necesario reservar antes en la Secretaría de la Galería. Se recomienda organizar este paseo con antelación.
Algunas salas de este nuevo edificio sirvieron para conservar obras de arte de la familia. Desde entonces, se fueron sumando nuevas y más obras que conforman hoy la colección de obras universalmente reconocidas de todos los tiempos. La Galería Uffizi (galería de los oficios) se aloja en el último piso de este edificio.
Se ven representados desde Giotto, Botticelli, Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Rafael, Caravaggio, Rembrandt, Rubens hasta maestros holandeses y alemanes.
El vestíbulo de ingreso de la Galería Uffizi exhibe sarcófagos, relieves, estatuas y bustos de la familia Medici.
Las salas 10 a 14 (convertidas en un único espacio grande) son unas de las más famosas por dos razones: porque era el antiguo teatro del edificio y conserva parte del techo original y por alojar obras maestras renacentistas, producidas en la última década del Siglo XV. Entre estas, se hallan La primavera y El nacimiento de Venus, de Botticelli, sobre temas profanos del Renacimiento italiano, que ilustran la cultura en Florencia de fines del siglo XV.
El nacimiento de Venus de Boticcelli
La sala 35 custodia La sagrada familia, de Miguel Ángel, en el que se ve a la virgen María sentada en primer plano, tomando a Jesús desde los brazos de José.
La Sagrada Familia de Migue Ángel
Hacía 1503
Óleo y temple sobre madera - 120 cm × 120 cm
Imperdibles obras del maestro Leonardo da Vinci
La sala 15 de la Galería Uffizi se ocupa de Leonardo da Vinci y muestra tres obras que desarrollan su camino artístico: la primera (El bautismo de Cristo) da cuenta de Leonardo como alumno de Verrocchio, la segunda (La Anunciación) es reconocida como la obra de su juventud y la tercera (La adoración de los magos) quedó inconclusa y testimonia la complejidad conceptual con la que trabajaba Leonardo.
La Anunciación de Leonardo da Vinci
Un recorrido por el arte europeo
Las demás salas del museo permitirán conocer una gran cantidad de pinturas y esculturas que enseñan el recorrido artístico europeo que refiere a un sinfín de hechos históricos de relevancia mundial. La Galería Uffizi es apasionante en cada rincón y promete al turista un paseo imponente y fantástico.
El museo tiene reglas de conducta que sugieren leer con antelación. Además, el edificio se conecta con el Palacio Pitti a través de un corredor elevado. Para poder visitarlo es necesario reservar antes en la Secretaría de la Galería. Se recomienda organizar este paseo con antelación.
Imágenes obtenidas desde wikipedia.org
domingo, 8 de marzo de 2015
Museos Vaticanos, Basílica de San Pedro y Capilla Sixtina
Quien visita el Vaticano, debe sí o sí recorrer los Museos Vaticanos, Basílica de San Pedro y la Capilla Sixtina.
Museos Vaticanos
Los Museos Vaticanos comprenden una serie de colecciones arqueológicas, una pinacoteca, colecciones de arte moderno y arte antiguo, objetos históricos y frescos de diversos pintores de gran renombre como Miguel Ángel y Rafael. Con centro en el Torso de Belvedere, los Museos Vaticanos son una muestra expuesta entre los espacios que se formaron al unir los dos Palacios: el Vaticano y el Belvedere.
La visita puede realizarse de lunes a sábados de 9 a 18. El último domingo de cada mes se abren las puertas de modo gratuito a todas las personas. Sin embargo, lo mejor es recorrerlo de martes a viernes en el horario del mediodía: poca gente y mucho para disfrutar y recorrer.
La Basílica de San Pedro
La Basílica de San Pedro es la Santa Sede. Alberga a más de 20000 personas y cuenta con obras maravillosas como la Piedad y la estatua de San Pedro. Lo más llamativo es su cúpula, iniciada por Miguel Ángel, desde la que se puede observar la Plaza de San Pedro, famosa por sus más de 250 columnas que dan sostén a 140 estatuas de diferentes santos. La entrada a la Plaza y a la Basílica de San Pedro es gratuita.
Vista general de la Basílica con la cúpula (wikipedia.org).
La Capilla Sixtina
La Capilla Sixtina no es nada más (y nada menos) que el escenario de coronación de los Papas, sino el lugar que reúne en sus paredes y techo los frescos más valorados en la actualidad: Botticelli, Luca, Miguel Ángel y Perugino. En el techo se recrean, por ejemplo, las historias del génesis, en donde se destaca la creación de Adán.
La creación de Adán, la más famosa de las imágenes de la bóveda (wikipedia.org).
sábado, 7 de marzo de 2015
Antigüedades Egipcias en el Louvre de París
El Louvre resguarda en
sus colecciones una gran cantidad de antigüedades egipcias. Estas no fueron una
herencia directa de cuando Napoleón estuvo en Egipto, sino que muchos años más
tarde fueron donadas por diferentes personas o compradas por algunos reyes.
Esta colección es la segunda colección más grande del mundo, luego de la del
museo de Cairo.
Entre las antigüedades egipcias más relevantes se destaca El
escriba sentado, exhibido en la sala 22 del primer piso. Es la obra más
famosa de una figura desconocida (no se conoce nada del escriba representado).
Es un hombre sentado con las piernas cruzadas, un papiro sobre la mano
izquierda y se cree que tendría algo sobre la derecha (hoy está perdida esa
pieza). Lo que más llama la atención son los ojos del escriba y esto impacta en
los turistas que la ven por primera vez.
Otra obra importante es la Gran
Esfinge de Tanis, ubicada en la primera sala de la planta baja. Una
escultura con cuerpo de león y cabeza de rey, que sugiere estar lista para
atacar ya que tiene el cuerpo tenso y las garras extendidas. Mide más de 4
metros de largo, casi 2 metros de alto y 2 de ancho. Es una auténtica artesanía
que se halló en 1825.
Siguiendo las salas, en la número 13, se halla el Sarcófago de Ramses III, de granito
rosa, que contuvo el ataúd del faraón. La tapa se exhibe en el museo de
Fitzwilliam de Cambridge y la caja es lo que se ve en el Louvre. Todas sus partes están grabadas con capítulos de libros
sagrados de entonces.
Además, esta magnífica colección de antigüedades egipcias incluye
momias, máscaras funerarias, pinturas como Cristo y el Abad Mena, una obra
conocida como Anillo de los caballos, esculturas como Paleta de los cazadores o
figuras en marfil. Un recorrido alucinante e imperdible para los amantes de la
historia y para los turistas ávidos de descubrir una cultura tan rica y
fascinante como la egipcia.
Cristo y el Abad Mena
(Imágenes obtenidas desde wikipedia.org)
lunes, 2 de marzo de 2015
Esculturas en el Louvre
Los amantes del arte recomiendan a quienes visitan París realizar un interesante paseo por la colección de esculturas del Louvre. Esta colección incluye una gran cantidad de obras de varias épocas y artistas y escuelas.
Sin dudas, la más deseada por quienes visitan la muestra es Afrodita o también conocida como La Venus de Milo de la Antigua Grecia. Es una escultura clásica del período helenístico con algunos detalles innovadores, como la composición en espiral y la cortina sobre las caderas. Se puede visitar en la sala 7 de la planta baja.
Además, otra pieza importante entre las esculturas del Louvre y del mismo período helenístico es La Victoria Alada de Samotracia, una escultura que seguramente fue una ofrenda por alguna batalla naval ganada. Realizada en el siglo II antes de Cristo, mide más de 3 metros y se ubica en la planta baja del museo.
El escultor y pintor francés Jean Pierre Cortot representó la llegada del soldado que avisa en Atenas la victoria de su ejército frente a los persas en Maratón. Este soldado corrió con la noticia y al llegar a destino falleció por el agotamiento. En el patio en la planta baja del museo se podrá admirar los detalles de esta obra conocida como El soldado de Maratón anunciando la victoria, que representa el orgullo del soldado, pero no el cansancio y los segundos antes de caer vencido. Cortot intentó representar un ideal.
Otra obra llamativa es Anfitrite, de Jacques Prou, ubicada en planta baja del museo. Una escultura de más de un metro y medio, sobre esta diosa del mar que se revela en un generoso cuerpo curvilíneo, inclinado hacia adelante sobre unos delfines. Los detalles que inculca el artista a la obra devuelven al espectador una escultura sensual y delicada.
Anfitrite, ubicada en la planta baja del Louvre
Otras obras recomendadas
El ángel con dos vinajeras (en la sala 5 de la planta baja), La cabeza del Apóstol (en la sala 9 de la misma planta), el grupo de obras de Dafne y Apoloy la Fuente de Diana (en la sala 15b).
(Imágenes obtenidas desde wikipedia.org)
viernes, 27 de febrero de 2015
Colección permanente de pinturas en el Museo del Louvre
El Louvre es sin dudas el museo más importante de Europa y quizá también del mundo. La colección permanente de pinturas en el Louvre es un atractivo sin igual para los artistas, pero también para los turistas que tienen la oportunidad de acceder a ese material de valor infinito.
Este museo se creó a través del interés de un monarca que quería que en su castillo haya una galería de arte. De esta manera, los reyes que le sucedieron continuaron adquiriendo obras. Más tarde algunas donaciones ayudaron a completar las colecciones de pinturas en el Louvre, que recorren 300 años de arte francés, italiano, español, entre otros. Varias pinturas fueron creadas en los mismos salones en los que hoy son expuestas.
La Gioconda de da Vinci
Son varias las obras de arte que se destacan, pero será una la más reconocida: La Gioconda, de Leonardo da Vinci. Esta pintura se encuentra en la sexta sala del primer piso del museo y es el centro de atracción más potente del lugar. Su nombre real es Retrato de Lisa Gherardini o Monna Lisa. Al ser Lisa la mujer de Giocondo es que se hizo conocida como La Gioconda.
Turistas fotografiando a La Gioconda en el Museo del Louvre
Su historia es un misterio. Se sabe que da Vinci la pintó en el siglo XVI y se han hecho numerosos estudios para determinar el porqué de la sonrisa, de los colores, de las telas sobre los hombros y del escenario que atrás devela el mundo del momento. Es una auténtica musa inspiradora de otras grandes obras, como películas, libros y obras de teatro.
Exquisito Arte Europeo
En la misma sala se encuentra Las Bodas de Caná, de El Veronés. Quien visite el museo no podrá dejar de ver esta obra, sobre todo por su tamaño: el óleo tiene casi 10 metros de largo por 7 de ancho. Es una pintura muy grande que representa el pasaje bíblico que cuenta la transformación del agua en vino.
Continuando el recorrido en el museo, se encuentra Betsabé en su baño, un retrato que realiza Rembrandt de una mujer desnuda con una carta en la mano, en la que es llamada por el rey al palacio. La angustia en su rostro se debe a la decisión que debe tomar: irse con el rey o esperar a su marido que estaba en la guerra. Los colores utilizados demuestran la influencia de otros pintores venecianos, como Tiziano.
También, los visitantes podrán encontrar obras de Jacques-Louis David, como La consagración del emperador Napoleón y la coronación de la emperatriz Josefina y El juramento de los Horacios. Además, La balsa de la medusa, de Gericault; La gran odalisca, de Ingres; la Virgen del Canciller Rolin, de Jan van Eyck; La Encajera, de Vermeer; La Muerte de la Virgen, de Caravaggio; El Buey desollado, de Rembrandt; La Virgen de las rocas, de da Vinci; y un autorretrato, de Durero. Cada una de estas se destaca por las diferentes escuelas, por los detalles, por los contextos en las que fueron creadas y por la historia que nos acercan a través de pinceladas, colores y trazos firmes.
El departamento de Pinturas en el Louvre es responsable de obras que datan desde el siglo XIII hasta el siglo XIX. Más de una decena de curadores se ocupan, según su especialidad, de mantener los cuadros, óleos y pinturas que hoy son protagonistas de la mejor exposición de arte europeo.
A continuación compartimos con ud. una de las tantas obras de arte que podrá conocer en el Museo del Lovre en París.
Jan van Eyck, Países Bajos (1395-1441)
Virgen del canciller Rolin
1435
Óleo sobre tabla; 66 cm. x 62 cm.
Virgen del canciller Rolin
1435
Óleo sobre tabla; 66 cm. x 62 cm.
(Imagen obtenida desde wikipedia.org)
viernes, 13 de febrero de 2015
Vincent Van Gogh, artista referente del Post-Impresionismo
Van Gogh, pintor holandés, nació en Zundert (Países Bajos) en el año 1853. Tuvo una muy buena educación y pasó por varios puestos de trabajo hasta descubrir en la pintura su pasión y vocación.
La segunda mitad del siglo XIX permitió que Vincent desarrolle una colección con más de 2000 obras, entre cuadros y dibujos. Será su hermano Theo el que se ocupe de apoyarlo desde lo económico para que Van Gogh se exprese a través de la pintura.
Si bien sus obras comenzaron con tonos sombríos, este artista, referente del postimpresionismo, es conocido por la luz viva de sus obras. Esta luz la transmite desde que se muda a Francia, luego de convertirse en pastor prostestante. Famoso y reconocido luego de su muerte, jamás se enteró de la gran influencia que sería para los pintores del siglo XX.
Sus obras recorren más de 40 autorretratos y casi 150 acuarelas y otros tantos dibujos y pinturas. Serán La noche estrellada y Los girasoles las imágenes más difundidas y deseadas del autor.
Los girasoles son una serie de obras donde el pintor representó en diferentes jarrones a estas flores con delicada exactitud, desde que están en flor hasta que se marchitan. Los colores resaltan en pigmentos amarillos, naranjas, ocres, logrados con pinceladas que dan relieve a la pintura. En la actualidad pueden encontrarse distribuidas por el mundo en el Museo de Arte Neue Pinakothek de Munich, en la Galería Nacional de Londres, en el Museo de Van Gogh en Amsterdam, en el Museo de Arte de Filadelfia, en el Museo de Arte Sompo en Tokio. Los lienzos tienen una cantidad distinta de girasoles cada uno, son de 90x70 aproximadamente y fueron creados hacia 1888.
Un año después, Van Gogh discutirá con su amigo Gauguin y en un ataque de locura realizará otra de sus más recordadas hazañas: se cortará la oreja.
Ese mismo año, dará lugar a otra de sus más reconocidas obras. La noche estrellada es interesante porque fue pintada de día, con el recuerdo de la noche, desde un manicomio en el que se recluyó por su estado de salud. Esta obra se halla en el Museo de Arte Moderno de Nueva York y se compara con una obra de Lord Resse y con otra anterior del mismo Van Gogh, en la que la noche y las estrellas son el eje de la pintura. En La noche estrellada los movimientos oscilatorios darán una atención especial al cuadro, que se completa hacia la derecha con un pueblo quieto y estable y hacia la izquierda con una estructura grande y movida.
Otras obras importantes, como sus autorretratos, se detacan porque se auto-utilizó como modelo para poder seguir desarrollando las técnicas. Algunas de estas pueden verse en el Museo de Orsay en París, en la Galería Nacional de Arte de Washington, en la Galería Tate de Londres, en las Galerías del Instituto de Courtauld en Londres, en los Museos Rijksmuseum y Van Gogh en Amsterdam o en el Museo de Arte Fogg en Harvard.
Vincent Van Gogh, Zundert, Países Bajos (1853-1890)
Noche estrellada sobre el Ródano
1888
Óleo sobre lienzo de 72,5 cm. x 92 cm.
Museo de Orsay en París
Noche estrellada sobre el Ródano
1888
Óleo sobre lienzo de 72,5 cm. x 92 cm.
Museo de Orsay en París
(Imágenes obtenidas desde Wikipedia.org y Google Cultural Institute)
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